Tiempo de balances y reflexión
Estudiantes evaluaron positivamente este periodo de acompañamiento.
Estudiantes de la primera generación que ingresó a la Universidad de Tarapacá, a través de un cupo del Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (PACE) egresan el programa y el acompañamiento después de tres años de trabajo, desde la Educación Media, hasta su primer año en la Universidad.
La actividad de cierre del trabajo del Área de acompañamiento en la Educación Superior (AES), contó con la participación de la responsable institucional del PACE UTA, Liliana Hernández Villaseca, la coordinadora ejecutiva, Paz Pérez Pino y el coordinador del Área de Preparación en la Enseñanza Media, José Imaña Cerda, además del equipo del programa y los estudiantes que egresaban.
En esta actividad de cierre, los estudiantes fueron invitados y participaron de un almuerzo en el restaurante “Varos” en donde se les agradeció por todos estos años de compromiso constante y los buenos resultados durante el primer año de vida universitaria. Además, se les entregó una constancia de su participación y se les instó a seguir dando lo mejor de sí mismos, para continuar con sus estudios de manera exitosa. También se les informó que el trabajo de acompañamiento académico, si bien, ya no sería a través del PACE UTA, lo van a poder obtener de las diferentes instancias de apoyo que entrega la Universidad, como el Programa de Tutores Pares, el Centro de Escritura, entre otros.
DESDE LA ENSEÑANZA MEDIA
Estos estudiantes PACE que hoy egresan, ingresaron al programa el año 2015, cuando este recién comenzaba a ejecutarse y los alumnos se encontraban cursando tercero medio en el Liceo Antonio Varas de la Barra de nuestra ciudad, que en ese entonces era el único establecimiento con el que se estaba trabajando y sin muchas proyecciones o expectativas de ingresar a la Educación Superior.
“También de alguna manera eran sueños nuestros ayudar a estos estudiantes a ingresar a la Universidad”, comentó el profesional del equipo PACE UTA, José Imaña quien, asimismo, indicó que era en ese momento incierta la forma en que el trabajo iba a resultar o evolucionar. “Esto fue creciendo y avanzando muy bien y ya el año 2017 pudimos lograr el ingreso de estudiantes de nuestra primera generación a la Universidad, sobre los cuales, ya conocíamos sus historias, fortalezas y aspectos a mejorar”.
En ese sentido, Imaña, evaluó positivamente este ingreso y el rendimiento obtenido por los estudiantes en su primer año de Universidad, el que señaló, fue bastante positivo y no presentó diferencias con el resto de estudiantes con otro tipo de ingreso. “Estos son chicos que vienen de un liceo técnico profesional, que no está enfocado en la rendición de la PSU y su currículo está orientado a las actividades técnicas, entonces como equipo y programa nos sentimos muy contentos y satisfechos con su desempeño y en ese sentido el balance es favorable”, destacó.
En tanto, Natalia Rojas, estudiante de primer año de la carrera de Tecnología Médica Imagenología y Física Médica, comentó que su experiencia y apoyo recibido en el programa fueron fundamentales en su proceso de ingreso y estadía en la Educación Superior. “Me ayudaron bastante durante lo que fueron estos tres años, fue clave en mi ingreso a la UTA y ahora en el primer año, el apoyo que nos brindaron fue muy valioso, siempre preocupados, atentos a cualquier requerimiento y dispuestos a atender nuestras dudas”, sostuvo la estudiante.
También, contó sobre los distintos sistemas de apoyo y acompañamiento recibidos en la Universidad, detallando que recibió tutorías personalizadas, clases de matemática y lenguaje, además de profesores de distintas áreas que la apoyaron para sacar adelante con éxito sus obligaciones académicas. Finalmente, Rojas dedicó palabras a los estudiantes que como ella van a ingresar a la Educación Superior gracias a un cupo PACE, señalando que “les digo que aprovechen siempre cada instancia de apoyo y no solo eso, que asistan a las actividades, salidas a terrenos, porque todo lo que los profesionales del programa planifican entrega una enseñanza y hace crecer como profesional y persona”, concluyó.
Cabe destacar que el programa PACE UTA atiende hoy a seis establecimientos de la región de Arica y Parinacota y un establecimiento de la Región de Tarapacá, entre ellos tres de zonas rurales, como Huara, Codpa y Putre, atendiendo a 1.649 estudiantes, con posibilidades de que ese número aumente, ya que, es posible que se incorporen dos establecimientos más el próximo año.